El jamón ibérico es un tipo de jamón procedente de la Península Ibérica, que comprende principalmente a España. El origen del jamón ibérico se remonta a siglos atrás, con una larga historia que se ha ido desarrollando a lo largo del tiempo.
El cerdo ibérico, raza autóctona de la Península Ibérica, es el protagonista principal en la producción del jamón ibérico. Estos cerdos son conocidos por su capacidad de adaptación al medio ambiente y su alimentación a base de bellota, lo que les otorga su característico sabor y aroma.
La cría del cerdo ibérico en la Península Ibérica tiene raíces antiguas, ya que se remonta a la época de los celtas y los romanos. Sin embargo, fue durante la Edad Media cuando se consolidó como una actividad ganadera importante en la región, especialmente en zonas como Extremadura, Andalucía, Salamanca, y Huelva en España, y el Alentejo y la región del Algarve en Portugal.
Durante siglos, los cerdos ibéricos se criaban en régimen extensivo, pastando en dehesas y alimentándose principalmente de bellotas, hierbas y otros recursos naturales de la zona. Esta alimentación rica y variada, combinada con la genética de los cerdos ibéricos, da lugar a una carne de alta calidad con características únicas.
El proceso de producción del jamón ibérico se ha transmitido de generación en generación, con conocimientos y técnicas tradicionales que se han ido perfeccionando con el tiempo. La curación del jamón ibérico es un proceso lento y cuidadoso, que puede durar varios años en algunos casos, y requiere de una selección minuciosa de los cerdos, una alimentación adecuada, y unas condiciones ambientales óptimas para obtener un producto final de alta calidad.
Hoy en día, el jamón ibérico es reconocido internacionalmente como un manjar gourmet, apreciado por su sabor, aroma y textura únicos. La producción del jamón ibérico se ha modernizado en algunos aspectos, pero aún se mantienen muchas de las prácticas tradicionales que hacen de este producto una verdadera delicia culinaria con una rica historia y tradición en la Península Ibérica.
Las distintas razas de cerdos ibéricos
- Cerdo Ibérico Negro Lampiño
- Cerdo Ibérico Entrepelado
- Cerdo Ibérico Colorado Retinto
- Cerdo Ibérico Rubio Andaluz
- Cerdo Ibérico Torbiscal
- Cerdo Ibérico Manchado de Jabugo
